Biomimetica

Elegí esta palabra como nombre para la siguiente nota. Es una curiosa, que si la analizamos nos damos cuenta de que contiene en sí misma su significado.

'Bio' referente a la vida, a lo que esta vivo, se mueve, siente, es de autoria de la naturaleza y 'mimetica' que quiere decir 'imitacion' si mas o menos la relacionamos con la palabra mimo.
'Imitacion de la naturaleza' es la definicion que le daría, pero si nos ponemos a pensar que tipo de imitación es, los mimos hacen las suyas con gestos mudos, palabras con el cuerpo, una imitación limitada y en cierto modo, artificial.

La primera vez que escuche esta palabra, fue en una conferencia de odontología, en el cual el especialista hablaba de como, con su técnica, restauraba los dientes, con materiales artificiales, de tal manera que terminaban siendo identicos a los naturales, copiando igualmente caracteristicas especificas y defectos.

Lo interesante de todo esto, es que hoy en dia 'biomimetizamos' tantas cosas que se podria decir que estamos en la epoca de la 'biomimetizacion'. Pero, como los mimos, solo imitamos aquello que se ve, con los ojos, los gestos, las formas fisicas, pues esa escencia de la naturaleza solo la puede aportar el insuflo del aliento del Creador.

A ver, vayamos al ejemplo mas sencillo.
Me asusta como, mucha gente hoy en dia, me incluyo, llega a sentir que se puede expresar con los medios tecnologicos, mas que con una comunicacion personal, de corazon a corazon. Las caritas ciberneticas, las imagenes, los mensajes, estan biomimetizando la parte humana de nuestra sociedad, convirtiendola en robotica y pasando a reemplazar el calor y el contacto personal, en el cual hoy en dia nos sentimos incomodos y para nosotros es mas facil abrir el corazon por medio del internet.

Que seria si no tuvieramos esa tecnologia? Volveriamos a la epoca de las cartitas?
Soy partidaria de que uno nunca sabe que tan sinceramente se expresa una persona si no es escuchando las palabras salir directamente de su boca y llegando a nosotros pasando por ese radar innato que es capaz de percibir la sinceridad, el sarcasmo, la ironia, la tristeza o el amor con el que una palabra puede ser 'dicha' y no 'escrita'.

 La naturaleza humana de los gestos, las palabras, las miradas y el contacto personal de una buena conversacion no se deben perder por una imitacion plastica y vacia que puede, o llenarnos de falsas esperanzas, o hacer que veamos las cosas mas frias de lo que son, atrofiando la comunicacion, dejando sin uso la mas eficiente manera de comunicarnos, dada por la naturaleza, por quien nos regalo una capacidad avanzada y original de intercambiar informacion y sentimientos: la natural.

continuación de la nota anterior

-tiene que ser una broma, o algún tipo de prueba- fue lo primero que pensó. Metió el papel en su bolsillo, confirmando cada cierto tiempo que estuviera ahí  para asegurarse de que no eran impresiones suyas. Cada tanto lo sacaba y lo miraba. Incluso llego a memorizar el numero como si aquellos nueve digitos fueran a decirle algo mas que un dato numérico.

-hago algo… o mejor lo dejo así- pensaba.- debería llamar… o mejor intentaré hablarle en persona… a lo mejor es una señal de que lo intente… no me voy a quedar así-

Paso los siguientes días debatiéndose en silencio, bajando la mirada cada mañana cada vez que ella llegaba, para evitar contacto visual. Finalmente se armó de valor un día y, minutos antes de salir, esperó que ella saliera.

-Señorita, hola.- dijo con un hilo de voz. Ella siguió caminando sin mirar. ‘debo terminar lo que empecé´ pensó el y caminando detrás de ella, logro captar su atención. –me preguntaba si podría almorzar con usted.- dijo rápida y torpe mente, tratando de preparar su mente para amortiguar cualquier posible respuesta, sea positiva o negativa.

-No acepto invitaciones en el trabajo.- fue su seca respuesta. Siguió caminando y desapareció por la salida. Tomas se quedó parado unos minutos con una sensación agridulce. Orgulloso de sí mismo por la valentía de haberlo intentado, pero a la vez sintiéndose un tonto, porque le habían advertido que aquello pasaría.

Entre la seca respuesta de ella y la osadía de él, se debatía en su mente algo que le impedía resignarse a que había sido rechazado… el número de teléfono.

Por qué razón se lo habría dado… de querer hablar con ella, desde cualquier departamento bastaba con marcar la extensión de su oficina … pero era un número local…

No dejó de darle vueltas al asunto y, resuelto a no pasar una noche mas con dudas, decidió llegar ese mismo día a una conclusión.

6:30. Sentado en la cama, en su pequeña habitación. Teléfono en una mano, número en otra. Sentía como la sangre subía por su cabeza hasta su cerebro. Marcó, apretó la mandíbula y acercó el aparato a su oído.

-Hola- contestó una voz femenina al otro lado de la línea

-Srita. Kim. Como está- dijo entrecortadamente.- habla el Sr. Tomas de la oficina.

-Si?-

-Es que… el otro día me dio su número y me preguntaba si se anima a tomar algo mañana.-

-Está bien. – dijo con voz pasiva… el estaba incrédulo. Su cerebro trabajó rámidamente y de pronto fijó hora y lugar.

-puees… hasta mañana- dijo sin poderlo creer. A pesar de las sucesivas noches con dificultades para conciliar el sueño, aquella fue de verdad una noche de insomnio. 

Entró confiada por la puerta de acceso al edificio. Aunque trabajaba allí, y todos la conocían, no era extraño que varias miradas se posaran sobre ella y pasara a predominar el escenario de aquella oficina.

Uno miraba tan solo más absorto que los demás. La sorpresa del primer día de trabajo, de ver entre tantos rostros cansados y avejentados, aquel bello y joven, de aquella mujer seductora que acababa de entrar por la puerta. El, flacucho y desgarbado, novato, recibía instrucciones desde su escritorio cuando la puerta se abrió y, como en las películas, todo se hizo más lento con cada paso que ella daba con sus tacones negros, sobre medias de nylon cubiertas por una falda de trabajo, saco, cartera en una mano, portafolio en la otra, pelo suave, que caía en cascada sobre sus hombros, paso firme y rostro inexpresivo, que daba la impresión de que nadie podía dirigirle la palabra.

Paso cerca suyo y el sintió como el nudo de su corbata parecía hacerse mas apretado. Se lo aflojo mientras tragaba en seco. Casi sin aliento, noto como ella se sacaba un papel pequeño del bolsillo delantero y se lo entregaba. Lo tomo casi mecánicamente y la observo mientras se alejaba.

-Al final del dia debes entregar estos reportes- dijo llegando el compañero que le había estado dando las instrucciones, cuando de pronto notó que el había estado mirando la muchacha.- no pierdas el tiempo… nunca le ha hecho caso a nadie en la compañía.- dijo – ni siquiera a los superiores, creo que si no fuera por las ganancias que genera con su trabajo, ya la habrían echado. Ha rechazado a todos aquí. –

-Se nota con esa actitud que no permite que nadie se le acerque…- murmuro Tomas,  mirando el lugar por el que minutos antes ella había desaparecido.

-Y ni lo intentes… Kim ha hecho pasar a más de uno, vergüenza… creo que no hay documento mas preciado entre todos sus subalternos que su número de teléfono- dijo cómicamente.- Bueno, me consultas cualquier duda.- y se retiró.

Una vez solo, hecho un vistazo a las cosas en su escritorio. Examino sus papeles y reparó en el papelito que le había entregado la Srta. Kim. Lo abrió y se paralizo al darse cuenta de que tenia anotado un número telefónico.

que creen? lo continúo?